Internet y las redes sociales llegaron a nuestra vida para revolucionarla y para cambiar por completo la forma en que nos relacionamos y, sobre todo, la forma en la que consumimos y adquirimos nuevos productos o servicios.
El proceso de compra ha cambiado de forma radical en los últimos años. Adiós demostraciones del producto puerta a puerta, llamadas telefónicas insistentes o correos electrónicos en cascada. Ahora, los consumidores tienen a mano una gran cantidad de información y toman decisiones en base a las recomendaciones y opiniones de otros usuarios.
Según datos del Estudio Anual de Redes Sociales 2018 de IAB España, el 57% de los usuarios busca información en alguna red social antes de hacer una compra online. Y no solo eso, sino que para el 55%, las opiniones de otros influyen bastante a la hora de tomar la decisión de compra.
¿Qué es el social selling?
Cuando hablamos de social selling o venta social nos referimos al proceso por el cual las redes sociales se convierten en las protagonistas en el proceso de venta. Es decir, son la herramienta clave para guiar a nuestro cliente hasta conseguir una venta.
Aunque el término lleve implícita la palabra venta, con el social selling no se persigue la venta directa a través de redes sociales. El objetivo, más bien, es atraer y persuadir al usuario, estableciendo una relación de confianza y ofreciéndole contenido de calidad que finalmente le lleve a interesarse por nuestro producto y a querer comprar.
Las redes sociales son la herramienta perfecta para conectar con nuestros clientes potenciales y así generar nuevas oportunidades de negocio, acortando el ciclo de venta.
Beneficios del social selling en negocios B2B
- Aumenta el ratio de ventas: permite enviar propuestas de negocio personalizadas
- Acorta el ciclo de ventas: cuando diriges tus esfuerzos hacia aquellos que ya sabes que necesitan tus productos, las probabilidades de éxito aumentan.
- Genera un mayor número de leads: trabajar la presencia en redes sociales a través de una buena estrategia fideliza y atrae a tu target.
- Crea vínculos más fuertes con tu sector: tener una red de contactos mayor hará que tu producto sea más visible.
- Aumenta la confianza: consigue una mayor fidelización del cliente y simplifica el proceso de venta.
Cómo se lleva a cabo una estrategia de social selling
- Identifica a tu audiencia: el primer paso es conocer el perfil de tu público objetivo y las plataformas sociales que utiliza para relacionarse y comunicarse.
- Genera y distribuye contenido de calidad: puede ser propio y también de terceros, pero siempre, relevante y con valor añadido.
- Relaciónate con tu público: interactúa con tus seguidores de forma que acabes convirtiéndote en un referente del sector.
Y tú, ¿necesitas ayuda con tu estrategia de social selling?

Me apasiona Internet y todo su mundo. Me considero un autodidacta todoterreno y me siento afortunado de poder desarrollar de forma profesional mi pasión. Compagino mi vocación profesional con los viajes a través del mundo y la fotografía. “Sigue siempre adelante, los caminos más difíciles a menudo llevan a destinos extraordinarios”.